Cala Millor acogerá un museo al aire libre, abierto de manera ininterrumpida a todos los públicos, con el objetivo de hacer llegar el arte a la gente. Los ayuntamientos de Sant Llorenç y Son Servera junto con la asociación hotelera, a través del consorcio de turismo, han apostado para atraer en 2018 un turismo cultural y, de esta manera, convertirse en un destino de referencia.
Su gran apuesta para el 2018 será el diseño de una ruta de arte urbano en aquellos espacios degradados, en casetas eléctricas, paredes e incluso en colegios de ambos municipios. Se trata de obras que embellecerán el espacio público y atraerán turistas a la zona.
Los murales serán realizados por el conocido artista local Sandro Thomàs (Sath), un comunicador visual que ha vivido muchos años en Bangkok y que cuenta con varias obras en la isla. Los diseños serán inéditos por lo que no se podrán encontrar en ninguna otra parte del mundo.
La idea es que cuenten historias relacionadas con el mar, la gastronomía y tradiciones de la comarca.
En un principio están previstas 13 intervenciones en diferentes puntos. La primera fase empezará en el mes de abril de 2018 y se realizarán seis murales, el resto se pintará en el 2019.
Desde el consorcio se editará un folleto informativo desplegable, en cuatro idiomas, con todos los detalles del proyecto. Además se hará la ruta ilustrada en un mapa, las direcciones de las localizaciones, las imágenes de los murales, información sobre los ayuntamientos y el artista. Se hará un vídeo promocional al inicio del proyecto. Cada mural tendrá una placa con el logotipo de la ruta y el título de la obra. Se contará con un código QR para dispositivos móviles.
Ambos ayuntamientos se están preparando para abordar la nueva temporada turística con cambios con el objetivo de atraer a muchos visitantes. Los diferentes núcleos costeros recibirán una importante inyección económica de casi dos millones de euros para modernizar varias de sus infraestructuras.