El Ajuntament de Manacor recepcionará en pocos meses la urbanización de Cales de Mallorca, solucionándose así otro de los problemas urbanísticos históricos del municipio. El departamento de Urbanismo confía en que este meses ya se hayan inscrito ante notario los últimos terrenos que serán propiedad municipal, una vez se haya regularizado la situación del núcleo en cuestión de ordenamiento de zonas verdes y de servicios fruto de su construcción en las años 60.
La regidora Isabel Febrer ha confirmado que la recepción está muy cerca y que será una realidad durante este mandato. Así lo anunció también la alcaldesa Catalina Riera tras tomar posesión como alcaldesa hace unas semanas. La regularización también afectará a la zona urbanizada de Cala Antena.
De esta manera, una vez recepcionado el núcleo turístico de Cales de Mallorca, el Consistorio asumirá el control total de los servicios. Hay que recordar que en la última década, la asociación de propietarios y el Ajuntament han tenido que trabajar duro para llegar a este punto. «El problema es que hemos perdido mucho tiempo localizando a propietarios de terrenos, comprobando superficies de solares, yendo a las notarías y también por culpa de la burocracia», apunta Febrer.
A partir de ese momento, los vecinos de Cales de Mallorca no notarán la diferencia pero el Ajuntament asumirá el control de todos los servicios básicos. Es decir, gestionará toda la iluminación pública, recogida de residuos y limpieza viaria y una red de alcantarillado y agua potable en gran parte obsoleta tras 30 años sin apenas inversiones de mantenimiento. Un punto que también se ha tenido que negociar con los propietarios.
Con la aprobación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), el Ajuntament de Manacor ya podrá aplicar la nueva normativa urbanística. Y es que durante la cesión de los pertinentes terrenos de la antigua urbanización al Consistorio, han aflorado diferentes episodios fraudulentos como el uso de una zona verde pública por parte de un complejo hotelero.