El Ayuntamiento de Ses Salines ha activado un protocolo contra la acumulación de residuos en las calles de la Colonia de Sant Jordi dada la «situación extrema» que está registrando el municipio.
Según ha recordado en un comunicado el Consistorio, la normativa vigente prevé penas de hasta 2.000 euros y un grupo de policías vestidos de paisano está a cargo de caminar por las calles para asegurar el cumplimiento de las regulaciones.
Asimismo, desde el Ayuntamiento se ha instado a la población a hacer uso de los contenedores adecuadamente y evitar depositar las bolsas de basura en la vía pública.
El alcalde, Bernat Roig, ha manifestado que «las muestras de incivismo de determinados residentes y visitantes ha convertido los alrededores de algunos contenedores en zonas totalmente insalubres, llenas de bolsas de basura depositadas en la vía pública y restos de desechos que causan malos olores y una imagen terrible».
«El incivismo que está sufriendo en toda la isla es inexcusable. No sirve de nada que invirtamos recursos para ponerlos a disposición de la población, si después la población no la utiliza de manera adecuada y responsable», ha dicho Roig.