Lo había advertido por activa y por pasiva. El alcalde de Escorca, Antoni Solivellas (PP), denunció este viernes ante la Unesco los problemas de acumulación de basura que afectan a la Serra de Tramuntana y muy especialmente al monumento natural del Torrent de Pareis.
En el documento, que va acompañado de un extenso dosier fotográfico, el alcalde responsabiliza directamente al Govern balear de la actual situación de «amenaza» ambiental por haber retirado los contenedores de las áreas recreativas de la Serra y por negarse a limpiar el Torrent de Pareis alegando que es una competencia municipal.
Así lo explicó Antoni Solivellas, que previamente ya había hablado por teléfono con Juan Maria Alzina, secretario general de la comisión española de la Unesco para hacerle llegar su malestar y acordar los detalles del envío de la información. El Ajuntament de Escorca también había dado parte de la situación hace semanas a la Guardia Civil.
El alcalde explicó que el escrito de denuncia de cuatro páginas en el que resume la situación vivida desde que hace seis meses el Ibanat se declarara gestor de residuos y retirara los contenedores de las áreas recreativas, va acompañado de un dosier fotográfico y de diferentes informes jurídicos, entre ellos el del catedrático de la UIB Avel·lí Blasco, que comparte la tesis municipal de que corresponde al Govern hacerse cargo de la limpieza.