Una semana después de la aprobación por unanimidad de la ordenanza de convivencia en el Ajuntament de Llucmajor, la Associació de Comerciants i Empreses de Serveis Turístics de Mallorca (Acotur) ha mostrado su malestar con el Consistorio llucmajorer «por la falta de consenso de la nueva normativa».
«Desde Acotur queremos denunciar la falta de respeto, ética y sensibilidad por la imposición del gobierno municipal de la ordenanza reguladora de convivencia ciudadana». Pepe Tirado, presidente de la asociación, añade que «hemos estado en distintas reuniones con el alcalde y dos regidores del gobierno municipal. El último encuentro fue el pasado 17 de enero en la sede municipal del Ajuntament en el Arenal. En ella se nos dio cuenta de dicha ordenanza y nos dijeron que nos convocarían de nuevo para poder presentarla oficialmente y consensuarla». «Es por ello -añade- que estamos enfadados y nos sentimos engañados. En este caso puntual, la falta de palabra del alcalde al enterarnos a través de Ultima Hora que la ordenanza fue aprobada sin contar ni con Acotur ni con el sector, creando un tremendo malestar por su gran importancia y calado».
Alcohol
La nueva normativa fue aprobada día 26 de abril. La normativa fue presentada por el regidor de Convivència Ciutadana i Policia, Gori Estarellas, y tuvo el apoyo de todo los grupos políticos (PSOE-Més y PI en el equipo de gobierno y PP, ASI y LLSSP en la oposición). Uno de los aspectos que señala la nueva normativa y que más ha molestado a los 42 socios de Acotur en el Arenal ha sido el punto que señala que «por razones de orden público, los establecimientos comerciales que incluyan el alcohol dentro de su oferta, sea cual sea su horario de apertura, no podrán vender entre las 24 y las 8 horas a excepción de establecimientos destinados a hostelería y restauración siempre que se consuman dentro de los locales». Los comerciantes reclaman haber podido opinar al respeto.