El proceso de obtención de un sello distintivo para la naranja de Sóller -ya sea a través de una Indicación Geográfica Protegida (IGP) o de una Denominación de Origen (DO)- ha avanzado «quince años» gracias a la localización en la Comunidad Valenciana de una reserva de variedad ‘canoneta' procedente del Valle de Sóller, la variedad local más característica y más apreciada por su jugo y cualidades organolépticas.
La Cooperativa de Sóller anunció este martes que un banco de germoplasma de Valencia, perteneciente al Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA), «conserva en su colección de planta viva ejemplares de variedad ‘canoneta' de Sóller y los podrá proporcionar a un vivero para que éste nos suministre a continuación portainjertos certificados y sanos de esta raza local, lo que significará dar un paso de gigante en el proceso de obtener la protección».
Miquel Gual, presidente de la entidad, acompañado de los técnicos Margalida Morey y Pep Mora, «celebró» el hallazgo de este recurso con el que «no contábamos».