La Asociación de Vecinos del Port de Pollença ha montado este fin de semana las hamacas y sombrillas de las playas del Moll y de la Cala Sant Vicenç sin tener la correspondiente autorización municipal puesto que aún no se ha resuelto formalmente el concurso de explotación.
Siguen así el modelo de la playa de Formentor, donde el hotel montó por su cuenta y riesgo hace semanas las instalaciones arriesgándose a una sanción de Costas.
El alcalde Miquel Àngel March confirmó este lunes que no ha dado ni puede dar autorización para prestar el servicio y mucho menos para cobrar por las hamacas o la sombra hasta que se haya adjudicado el concurso público de explotación y se haya firmado el correspondiente contrato. No obstante emitió un comunicado en el que presume de la «normalización» de la situación del Port tras el montaje de las playas y la instalación de mobiliario urbano en el paseo. «No podemos dar permiso para montar. No nos parece ni bien ni mal, puedo decir que dado lo avanzado de la temporada y el interés público del servicio no vamos a intervenir», dijo el alcalde.
El plazo para presentar ofertas al concurso de explotación de las playas finalizó la pasada semana y se ha presentado una única oferta por lote, la del hotel Formentor para la playa de Formentor y la de la asociación de vecinos para las playas del Moll y la Cala. No obstante el procedimiento legal aún no se ha resuelto a falta de abrir el último sobre y comprobar que las ofertas cumplen todos los requisitos exigidos.
Tots criticó la «falta de consenso» en este asunto. En el mismo sentido se manifiesta Alternativa que exige responsabilidades por el retraso y los errores de la licitación.