«Satisfacción total por esta sentencia que ha dado la razón al recurso que presentamos el GOB y el PSM», ha señalado este viernes, en los terrenos de Son Bosc, Biel Barceló, coordinador de la formación ecosobiranista MÉS per Mallorca. Ha remarcado que esta licencia ha demostrado que el proyecto «no era legal, y también que no nos equivocamos con las actuaciones que hicimos en su momento en defensa del territorio».
Barceló ha destacado el trabajo realizado en ese momento por la conselleria de Medi Ambient dirigida por Biel Vicenç y también la del actual conseller Vicenç Vidal, quien formaba parte de este equipo que, «con la normativa europea en la mano», aplicó la protección directamente a este espacio y consiguió parar las obras, «porque ahora nos podríamos encontrar con la paradoja de tener una sentencia favorable y unas obras ejecutadas y este paraje totalmente irrecuperable y destruido», apunta Barceló. «Sin la protección que hicimos, el campo de golf estaría construido y Son Bosc sería irrecuperable», dice.
En este sentido, MÉS manifiesta una doble satisfacción, por el trabajo realizado desde el gobierno entonces y la del PSM y el GOB para conseguir que se detuvieran las obras. Barceló ha recordado que «la decisión de defender Son Bosc costó el pacto, por esta licencia concedida al Ajuntament de Muro».
Así, tanto el GOB como MÉS por Mallorca han celebrado este viernes la sentencia que dice que el campo de gol de Son Bosc es ilegal tras un procedimiento jurídico de 8 años.
La sentencia publicada este 18 de febrero de 2016 consolida la protección de esta zona, que ya es zona de protección para las aves. Esta protección se otorgó el gobierno en 2011. «Y a partir de ahora las obras no sólo están paralizadas sino que son consideradas ilegales», señala Toni Muñoz, portavoz del GOB, quien también ha querido destacar que detrás de estas obras «hay tres grandes cadenas hoteleras, que tienen desarrollo importante alrededor de Son Bosc y que pretendían hacer aquí una oferta complementaria».
El que en su momento fue concejal del Ajuntament de Muro, Jaume Payeres, remarcó que el Consistorio «hizo caso omiso a otros informes que ya apuntaban que era ilegal la licencia municipal. Cogieron los favorables. El de los funcionarios no se tuvo en cuenta, sino que cogieron el de la promotora. Hicieron copia y los dieron como buenos», recuerda Payeres.