El PSOE (al frente del equipo de gobierno del Ajuntament de Calvià) apoyó, en el pleno de este jueves, la moción presentada por sus socios de Si Se Puede Calvià (SSPC) para que se suprima de la ley de haciendas locales la exención del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) a la Iglesia católica y a otras confesiones religiosas, sin especificar cuales.
El portavoz de SSPC y séptimo teniente de alcalde, Israel Molina, vinculó el déficit de España y la caida de la actividad económica a una serie de circunstancias que, a su juicio, agravan las exenciones fiscales de las que disfrutan diversas entidades. Molina comparó esta exención del IBI al fraude fiscal como causa de agravamiento de la situación de las arcas municipales.
El PSOE justificó su voto favorable argumentando que los «privilegios» tienen que acabarse y que «se tiene que avanzar en la autofinanciación de la Iglesia católica». El alcalde Alfonso Rodríguez Badal puntualizó que el apoyo de su partido obedece únicamente a la «justicia fiscal», al tiempo que aclaró que, en su labor social, «la Iglesia católica tendrá todo el apoyo del PSOE y del Ajuntament».
Desde la oposición, el PP justificó su rechazo a la moción debido al carácter «ideológico y radical» de la misma, que, en su opinión, no tiene otra finalidad que la de tomar posiciones «en una carrera que se abre para ver quién le arrea más fuerte a la Iglesia católica.