«Hicimos las obras del hotel sin licencia pensando que llegaría y aún estamos esperando». Así de rotunda se mostró Margarita B., administradora de la sociedad y propietaria del hotel investigado en la presunta trama de corrupción urbanística de ses Salines.
La máxima responsable de complejo hotelero reconoció ante el Juzgado de Instrucción número 1 de Manacor y de la fiscal anticorrupción Ana Lamas que realizaron obras de manera 'ilegal'.
«A principios de febrero abrió el hotel y no podía tener clientes y obras en marcha, por eso tenía prisa en acabarlas. Hicimos la ampliación sin licencia porque pensábamos que estaba a punto de llegar y, a día de hoy, aún no la tenemos. Ahora me dicen que el ingeniero del Ayuntamiento está a punto de dar la licencia y hoy (día que declaró) le han dicho que Sebastián Ll. (su ingeniero) aún tiene cosas que hacer para que se la concedan. Todo ello desde 2013», apunta en su declaración la hotelera.
La administradora también confesó que conocía a la exalcaldesa porque es clienta de la gestoría donde trabajaba la primera edil.
Por su parte, María Bonet, alcaldesa de ses Salines entre diciembre de 2012 y junio de 2015, declaró ante el juzgado que tenía conocimiento de las obras del hotel Villapicola y que la ampliación consistía en hacer un piso de más.