Insólito preacuerdo político en Maria de la Salut para desbloquear la acción de gobierno y dar cierta estabilidad al funcionamiento del Consistorio esta legislatura. El acuerdo aun no está cerrado, pero las partes, que manifiestan voluntad de alcanzarlo, esperan sellarlo definitivamente este jueves.
El preacuerdo prevé que cada una de las formaciones representadas en el pleno (PP, PI, PSOE y MÉS) dispongan de un representante en la junta de gobierno, que presidirá el alcalde del PP en minoría, Antoni Mulet. Los otros miembros de la junta serían los portavoces de cada partido de la oposición: Biel Mas del PI, Bernadí Gual del PSOE y Guillem Jordà de MÉS. Las decisiones que tome, pues, tendrán que estar consensuadas por dos grupos como mínimo.
Las competencias que ostentará la junta de gobierno todavía están por determinar. La oposición pretende controlar y participar de la acción de gobierno a través de la junta y el pleno.
El preacuerdo incluye que la oposición vote a favor de que el alcalde Mulet perciba la llamada ‘dedicación exclusiva', la retribución que el Govern paga al alcalde o a un regidor de los consistorios de menos de 6.000 habitantes. En el último pleno, la oposición vetó la aprobación de ésta y otras iniciativas relativas a sueldos y al funcionamiento del Consistorio.