En Montuïri se respiran aires de cambio, aunque todo está por decidir. El PP, en el gobierno municipal desde hace 28 años, está sufriendo el desgaste de casi tres décadas en el poder; a lo que hay que añadir una cierta contestación interna a la gestión realizada por el alcalde Jaume Bauzà.
Paralelamente, las asociaciones se han activado de tal modo que hasta la oposición ha ido a remolque de ellas liderando este posible cambio que acabe con la mayoría absoluta del PP.
El candidato de Més, Joan Verger, se perfila otra vez como la segunda lista más votada, con opciones a presidir un Consistorio progresista. Verger presenta una candidatura renovada con mucha ilusión para cambiar el pueblo.
El PSOE vuelve a apostar por Guillem Mas, un político con experiencia que será imprescindible de cara a un hipotético cambio de gobierno.
La gran incógnita será el PI de Joan Manera. Históricamente, la antigua UM no fue nunca capaz de conseguir un regidor en el Ajuntament. Ahora, bajo el nuevo proyecto del PI, se intentará conseguir el reto, siendo posible arañar votos de los descontentos con la gestión del PP.
Aunque se respiren aires de cambio, todo está por decidir porque el PP siempre ha demostrado una gran capacidad de movilización.