Convergència per Can Picafort, Santa Margalida i Son Serra, el partido de Joan Monjo, hizo perder este lunes una votación a su socio de gobierno, Suma pel Canvi (coalición de izquierdas que forman los Independents y el PSOE). Era la primera vez en toda la legislatura que ocurre algo así. Varias fuentes interpretan el desmarque en clave preelectoral, como una prueba del distanciamiento previo a las elecciones de mayo.
La polémica llegó en el último punto del pleno, la aprobación de la relación de puestos de trabajo del Ajuntament de Santa Margalida. La relación regula aspectos laborales de los trabajadores municipales. Convergència y Suma la habían consensuado previamente. Al discutirla, sin embargo, Monjo hizo una enmienda para que la Policía Local quedara excluida de la misma, pero Suma la rechazó. Al votarla, Convergència se abstuvo, el PP y Can Picafort Unit votaron en contra y solo Suma la apoyó. El alcalde y la izquierda, pues, perdieron, y la relación no se aprobó.
Suma calificó de «acto de deslealtad» la abstención del socio de gobierno y aseguró que ello «ha provocado «indignación» en sus militantes. «Consideramos que deberían revisarse los acuerdos con Convergència y la validez de los mismos teniendo en cuenta este tema y otros asuntos importantes», avisa Suma.
Monjo justificó su voto en que el sindicato policial se oponía. «Queríamos que lo de la policía quedara sobre la mesa», manifestó.