Carcasas de cámaras de vídeo vacías, aparatos de grabación sin cables de corriente, grabaciones que nadie ve o cámaras que graban el punto verde y que se controlan desde el Ajuntament del pueblo: esta es la situación, desde hace años, de la mayoría de parques verdes de la Isla para evitar malas prácticas. Según la Delegación del Gobierno -órgano encargado de autorizar las grabaciones- ningún Ajuntament puede tomar imágenes en estas instalaciones. Así lo refleja la web de la Agencia de Protección de Datos.
Fue a partir de la negación por parte de la Delegación del Gobierno del permiso al Ajuntament d'Artà para instalar cámaras en el parque verde de la Colònia de Sant Pere cuando el regidor dels Verds-Esquerra de Artà, Guillem Caldentey, publicó en la cuenta de Twitter de su partido la negativa al Consistorio artanenc. Poco después, este periódico publicó una importante sanción del Ajuntament de Sant Joan a un usuario identificado con cámara de vigilancia que hizo mal uso del punto verde.
Ante la falta de autorización de los ayuntamientos por la Agencia Española de Protección de Datos, sí que existen permisos para tomar imágenes en edificios públicos, como las casas consistoriales, cementerios o cuarteles de la Policía Local. Por esa razón, Ultima Hora realizó la consulta a la Delegación del Gobierno en Balears, que confirmó que ningún municipio puede instalar cámaras y registrar imágenes en los puntos verdes.
Los propios alcaldes han confirmado la situación de precariedad que viven en cada municipio. Es por todo ello que los alcaldes reclaman a la Delegación del Gobierno que mueva ficha para que se puedan controlar estos puntos de manera legal.