El abogado de Alfonso Cortina, Juan Nadal, tratará de demostrar que el impacto del chalet del empresario en Formentor «ha disminuido» y que actualmente «no es superior» al de otras construcciones edificadas en la primera línea de la urbanización.
Este viernes se reunirá con los responsables municipales para analizar cómo el Ajuntament de Pollença puede ejecutar la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de las Balears (TSJB) que obliga al Consistorio a «demoler lo construido si es que las obras realizadas no fueren ahora legalizables».
La abogada del vecino que denunció la construcción, Antonia Gomila, confirmó que «estaremos pendientes de su correcta ejecución especialmente en lo que se refiere a altura e impacto».
Ya durante el juicio, la parte demandada aportó un informe que aseguraba que se habían emplazado frente a la fachada 39 pinos de 10 metros de altura y que 31 pinos más habían sido utilizados para ambientar el acceso desde la calle «mitigando el impacto visual».