«La uva presenta una buena maduración, graduación y un muy buen estado sanitario por lo que se prevé una vendimia de muy calidad». Con estas palabras presentó ayer la gerente de la Denominació d'Origen (DO) Binissalem, Margalida Amat, el primer balance de la vendimia de este año que se inició el pasado 6 de agosto y que «lleva un ritmo constante y más rápido que los años anteriores».
Amat realizó estas declaraciones durante la presentación de ayer por la tarde de las fiestas que cierran el verano mallorquín, las fiestas des Vermar que este año llegan a su 50 aniversario.
El Casal de Can Gelabert fue el escenario del acto de presentación «porque hace 50 años fue justamente aquí donde un grupo de jóvenes decidieron organizar unas fiestas entorno al vino», según recordó el alcalde, Jeroni Salom, durante su parlamento de ayer.
Ante un centenar de personas, Salom tildó el programa de actos de las fiestas que terminarán el 28 de septiembre de «espectacular». «Hemos intentado conjugar tradición, cultura, solidaridad y respeto», dijo el alcalde que volvió a apelar a la responsabilidad de los participantes recordando el lema « amb una gota basta» que busca evitar el consumo excesivo de alcohol durante las fiestas.
Representación
Aunque los actos estrella (la batalla de uva, las carrozas o la comida de trepitjadors ) se mantienen como cada año, en esta edición y con motivo de la celebración del medio siglo de las populares fiestas, el próximo 16 de septiembre se celebrará un acto institucional en el Consolat de Mar donde los vermadors de todas las ediciones de las fiestas, encabezados por los vermadors de este año, invitarán a las máximas autoridades a participar en los actos. Todos estos vermadors también presidirán el acto central del día grande de las fiestas que se celebra el último domingo de este mes.