Los consistorios de Marratxí, Santa Eugènia i Santa Maria han alquilado un solar en esa última población para que la Conselleria d'Educació instale en él las cuatro aulas prefabricadas que se necesitan para que el inicio del curso escolar transcurra sin incidentes (dejando ahora a un lado la huelga anunciada por un gran número de docentes) para los alumnos de los institutos de secundaria de Sant Marçal y Santa Maria.
Dicho solar se halla muy próximo a la Escola Graduada Vella, el edificio que lleva dos años acogiendo, con carácter provisional, la sede física del marratxiner IES Sant Marçal. Según explicó Rosa Vich, la alcaldesa de Santa Maria, el coste mensual del alquiler del solar es de 900 euros, y lo pagan los tres ayuntamientos a partes iguales. Los operarios trabajaban ayer la adecuación del terreno: nivelación del suelo, conexión a las redes de agua, etcétera. Nicolau Canyelles, responsable de Urbanismo de Santa Maria, estimó que el coste de esos trabajos rondará los 4.000 euros. Los gastos correrán también a partes iguales entre los tres municipios implicados. Canyelles detalló que los módulos prefabricados acogerán, según las previsiones de los equipos directivos, las aulas de plástica, música y los laboratorios de ciencias, de forma que los alumnos se trasladarán a ellas únicamente al cursar esas asignaturas. El coste del alquiler de las aulas prefabricadas correrá a cargo del Govern.
Después de Navidad
Según la previsión de la Conselleria d'Educació, las obras del IES Sant Marçal estarán acabadas dentro de tres o cuatro meses. Entonces los alumnos marratxiners se trasladarán al nuevo edificio, en Sant Marçal. Santamariers y taujans , en cambio, se quedarán en la Escola Graduada Vella, cuyo espacio les resultará suficiente.
Se mire como se mire, la Escola Graduada Vella de Santa Maria, que se construyó durante la Segunda República, acogerá durante los meses de septiembre, octubre, noviembre y diciembre a los alumnos de dos institutos públicos sin sede física, sin edificio.