La presidenta del Consell de Mallorca, Maria Salom, ha anunciado hoy a través de su perfil de Twitter que la carretera que une Andratx y Estellencs, muy afectada por el incendio forestal que azotó durante toda la semana pasada la zona, volverá a abrirse a finales de esta semana.
Tras su apertura, continuarán las tareas de limpieza de los laterales de la carretera, así como la reparación de las barreras de seguridad que también resultaron muy dañadas con el incendio, informa en una nota de prensa el Consell de Mallorca.
Posteriormente, se llevará a cabo la instalación de las mallas metálicas en los taludes, que frenarán los pequeños desprendimientos.
Ayer mismo, un grupo de 300 vecinos del municipio de Estellencs -que tuvieron que ser desalojados durante varios días por la proximidad del fuego- realizaron una marcha protesta contra la lentitud con la que, según este colectivo, avanzan los trabajos de reapertura de la Ma-10, concretamente entre los puntos kilométricos 94 y 110.
Riesgos por desprendimiento
La semana pasada, el Consell realizaba una primera estimación del coste de la reparación de la vía, calculándola en aproximadamente 600.000 euros. La institución insular anunciaba la tramitación de un decreto de emergencia para afrontar los daños ocasionados por el fuego, que contempla la contratación de brigadas extraordinarias que se sumarán a los operarios que trabajan actualmente, así como la reparación de todos los desperfectos que ha sufrido la carretera durante estos días.
Según las primeras valoraciones de la Dirección Insular de Carreteras, el fuego ha destruido o dañado señales de circulación y casi todas las barreras mixtas de madera y acero instaladas en curvas y zonas de acantilados, a lo largo de casi 15 kilómetros de carretera.
Pero el mayor peligro, según la institución insular, son los desprendimientos de piedras, provocados por la quema de la vegetación y las altas temperaturas, que rompieron las rocas y que serán más grandes cuando se inicie la época de lluvias.