Faltaban diez minutos para las diez de la mañana y frente al antiguo Ajuntament se iban concentrando pequeños y mayores para esperar la tradicional salida del Dimoni. Centenares de camisetas negras, con el retrato del demonio, aguardaban entre emoción, nervios y cierto temor a uno de los protagonistas de las fiestas de Santa Praxedis. Este año el acto registró una gran afluencia de residentes y gente llegada de pueblos vecinos.
Los xeremiers , flabiols y tamborinos ponían las primeras notas. Puntual a la cita asomaban las banyes y oculto tras una vestimenta roja aparecía el Dimoni con ganas de 'donar branca'. Los pequeños buscaban hacerle enfadar y él respondía corriendo tras ello, con el bastón en alto. Incluso alguno se llevó un susto mayor al ser 'secuestrado' por el protagonista.
Durante toda la mañana la comitiva recorrió las calles de la localidad, desplazándose de comercio en comercio, pidiendo las tradicionales 'joies'.
El Dimoni volvió a ser protagonista por la noche. A las 20,15 horas hizo una salida y posteriormente hubo las completes de Santa Praxedis a la iglesia de Sant Pere. Ya lo dice el dicho: A Petra el dimoni s'hi va retre!!