El SATSE o Sindicato de Enfermería cargó ayer de nuevo contra la gestión política (los recortes o ajustes) del Hospital Comarcal de Inca. Si hace una semana ese mismo sindicato denunció que se habían cerrado veinte camas y un quirófano temporalmente, lo que provocó una acumulación de pacientes en Urgencias, ayer acusó a la gerencia de «desmantelar [de personal] el paritorio durante el verano». Esa denuncia se une a las que han venido formulando el PSOE, Esquerra Republicana, Esquerra Unida y CC.OO la última semana.
Concretamente, SATSE critica que «desde el pasado mes de noviembre el paritorio está cubierto por una matrona, una enfermera y una auxiliar, una situación totalmente irregular puesto que lo óptimo, como mínimo, son dos matronas por turno». «Si durante el verano se diera el caso de una cesárea urgente [...], el paritorio quedaría atendido por una sola matrona». Dicha hipótesis podría producirse hoy mismo, avisan.
¿Ninguna matrona?
SATSE indica que el Hospital contempla en su previsión «que pueda quedarse sin el servicio de ninguna matrona». «En ese caso la gerencia reconoce que se contratarían matronas de Atención Primaria incurriendo en un fraude de ley», añade. «La deleznables políticas de contratación de la gerencia del Hospital de Inca únicamente contemplan el recorte presupuestario y no el bienestar ni de los pacientes ni del personal», enfatizan.
Todo ello, denuncia el sindicato, habría provocado «una situación caótica» en el paritorio. «Sospechamos que tras estas prácticas de gestión de personal la gerencia se esté planteando su viabilidad y continuidad», manifiestan.
Por su parte, fuentes del centro sanitario aseguraron que del paritorio «no se ha reducido ningún servicio ni prestación ni tampoco la plantilla». Cuanto al «desmantelamiento» denunciado por el Sindicato de Enfermería, lo negaron rotundamente.