El Santuari de Lluc ha cambiado el sistema de tarifación de su aparcamiento cuando se cumplen nueve meses desde el fin de la gratuidad del servicio. Desde el 3 de abril de 2012 los vehículos pagaban cuatro euros diarios por estacionar en el Santuari con independencia de la duración de la visita. El precio daba derecho a entrar en el Museu de Lluc que hasta entonces era de pago. En pocos meses el museo se convirtió en el más visitado de la Isla pero una vez batido el récord el Santuari se replantea su oferta.
Desde el 23 de diciembre aparcar y visitar el Museu de Lluc sale más caro o más barato, dependiendo de si se es o no residente (hasta ahora no se distinguía) y del tiempo de la estancia.
Precios máximos
La primera hora de aparcamiento cuesta dos euros y a partir de ese momento el pago se tarifa por minutos, a dos céntimos el minuto durante la segunda hora de estancia. A partir de la segunda hora el coste es de 1,3 céntimos el minuto y se establece un precio máximo diario para residentes de 3,98 euros (el equivalente a tres horas completas) y de 4,80 euros para los no residentes (el equivalente a cuatro horas completas). Unos y otros deberán pagar 1,5 euros extra por persona si quieren visitar el museo.
Pere Muñoz, gerente del Santuari defendió ayer que «el cambio de tarifas «supone un abaratamiento para la mayoría que hasta ahora pagaba cuatro euros y pagará dos porque las estadísticas nos dicen que el 75 por ciento de la gente que nos visita está de media entre una y dos horas».
Por contra, el Santuari incrementará sus ingresos por cada no residente que visite el Santuari si su visita supera las tres horas. Los turistas tendrán que pagar 4,80 euros si aparcan más de tres horas en Lluc y deberán abonar 1,50 euros (por persona, no por vehículo) si durante su visita quieren acceder al museo.
«Los cambios no se han introducido a petición de nadie sino porque pensamos que es un sistema más justo», explicó ayer Muñoz quien asegura también que «desde que la visita al museo era gratuita la gente no valoraba el fondo museológico y había días que había 600 visitantes en el museo, algo que era peligroso para la conservación del propio museo, el hecho de discriminar quién tiene interés realmente en visitar el museo y quién no supondrá una mejora en la seguridad del propio museo».
El cambio en las tarifas de aparcamiento coincide con la ampliación del servicio de Policía Local en el municipio que ahora también tendrá vigilancia por las tardes.