Siete años después de ceder a las presiones vecinales y demoler las casetas que construía en primera línea de mar junto al aparcamiento de la zona portuaria, Ports de les Illes Balears vuelve a construir sin permiso municipal casetas en la misma zona.
El alcalde, Bartomeu Cifre (PP), envió el viernes al celador de obras municipal para que realizara un informe que, aunque no es preceptivo en el recinto de Ports, pretende ejercer cierto control sobre la estética que tendrán las nuevas instalaciones.
Hasta el momento se han instalado seis casetas de madera prefabricadas bajo la pérgola. El proyecto impulsado en 2005 y que se acabó demoliendo contemplaba la construcción de ocho casetas y dos baños públicos. La idea consistía entonces en sacar las casetas a subasta para que las empresas marítimas pudieran prestar en ellas sus servicios.
«Ahora, con la obra ya comenzada, nos ha llegado una carta de Ports solicitando el informe municipal que tiene que ser previo y explica que son desmontables. Ya veremos», dice el alcalde.