El Club Náutico Can Picafort construirá con permiso de Ports del Govern un edificio social que albergará una pequeña cantina, una sala de reuniones y aseos, todo ello contraviniendo la normativa municipal que prohibe este tipo de usos dentro del puerto.
El Ajuntament de Santa Margalida ha informado desfavorablemente del proyecto, dado que el uso está expresamente prohibido por la normativa urbanística local vigente que data de 1986 pero las decisiones de Ports están por encima de la opinión municipal cuyo informe no es vinculante.
«¿Qué es lo que ocurre, que todos los clubs náuticos de Mallorca están mal hechos?», por lo que yo sé Ports ya ha dado el visto bueno, dice el presidente del Club Náutico Can Picafort, Antoni Monserrat quien explica que ya tiene «el visto bueno de Ports porque además por lo que tengo entendido según la Ley de Puertos es obligatorio disponer de una pequeña cantina y baños».
El Club Náutico Can Picafort gestiona las instalaciones desde mayo cuando, después de años de litigio, el juez dio por finalizado el contrato por el que la entidad Puerto Deportivo S.A. gestionaba las instalaciones.
El Club Náutico recurrió a los tribunales para recuperar la concesión al no haberse realizado toda una serie de inversiones previstas en el contrato y que desde mayo se han vuelto a activar.
Así, tras el dragado generalizado de la dársena que permitió recuperar la escuela de vela el club planea iniciar este mes de enero obras en la explanada principal, en las casetas y junto al faro.