Los pueblos de Mallorca se pueden quedar sin fuegos artificiales. Así lo confirmó ayer la dueña de la empresa Pirotècnia Jordà de Lloret, Isabel Ferrer, después de declarar que «después de todo el verano de trabajar no hemos cobrado ni un euro de ningún ayuntamiento, que alegan falta de presupuesto».
De esta manera, Ferrer explicó que «la situación es insostenible y si no se satisfacen las deudas o se adelantan algunos pagos nos veremos obligados a despedir personal o incluso cerrar la empresa a finales de año». Pirotècnia Jordà es la única empresa de Mallorca que se dedica a los espectáculos de fuegos artificiales.
Aunque la empresa es familiar (tiene ocho empleados), «no podemos hacer frente a los pagos de las nóminas debido al impago de los ayuntamientos, ya que incluso alguno nos debe el año 2008», informó Ferrer, quien dirige la empresa junto a su marido, Antoni Jordà.
«La venta de cohetes a particulares nos ayuda a tener para vivir, pero si los consistorios no nos pagan no podemos mantener abierta la empresa que ya va por su tercera generación», acabó Ferrer.