«La capitalidad cultural y geográfica de la Serra de Tramuntana, Patrimonio Mundial de la Unesco, tiene que ser el Valle de Sóller». Éste es el mensaje que los dos alcaldes del Valle mayor de la cordillera mallorquina lanzan de forma conjunta, reclaman para ambos municipios, de forma compartida, uno o varios centros de interpretación de este territorio ahora ya catalogado a nivel mundial por la UNESCO.
El alcalde de Sóller, Carlos Simarro, afirma que «sin lugar a dudas el Valle de Sóller representa mejor que ningún otro lugar de la Serra los valores tradicionales y culturales que ahora han permitido esta declaración». Además, «es el municipio mayor y geográficamente es el centro neurálgico de la Serra» y recuerda que «la mayoría de visitantes de Tramuntana entran por el Valle de Sóller».
Cultura
Simarro también recuerda que «Sóller es el municipio de Tramuntana que cuenta con más infraestructura cultural relacionada con el territorio -como el Museo de Ciencias, el Jardín Botánico y el Museo del Mar- que se podrían integrar en una red local de puntos de interpretación del territorio protegido». Afirma que «si hemos ofrecido el matadero municipal como centro de interpretación es porque este edificio sirvió durante muchos años para dar salida a la ganadería tradicional de la Serra, una de las actividades sostenibles que también ahora han permitido la declaración». Cree que «Sóller y Fornalutx tienen que hacer un frente común para conseguir esta merecida capitalidad y confiamos en que la Unesco, la UE y otros organismos oficiales proporcionen medios para construir este centro o centros en el Valle».
Por su parte, el alcalde de Fornalutx, Joan Albertí, comparte plenamente las opiniones del alcalde del pueblo vecino. Albertí cree que Fornalutx, no puede quedar de ninguna manera al margen y se tiene que integrar en una red de centros de interpretación del Valle, por lo que ofrece una parte del casal de Can Xoroi, ya que «es un lugar que refleja la arquitectura de la Serra y también sus actividades tradicionales como la tafona de aceite».
Delegación
Albertí cree que aunque la Fornalutx es más pequeño, «sin lugar a dudas ha de acoger una delegación en Can Xoroi ya que es un gran atractivo».
Ambos alcaldes coinciden en que dotar al Valle de uno o varios centros de interpretación supondría poner de manifiesto los valores compartidos por ambos municipios «separados sólo administrativamente pero unidos por vínculos históricos y medioambientales».
Para Simarro «el aumento de visitantes beneficiaría a los dos pueblos ya que actividades como el senderismo son igualmente importantes. Para Albertí, además, la capitalidad «sería sin duda una fuente de más puestos de trabajo».
Precisamente ninguno de los dos municipios tiene aprobado su catálogo de caminos públicos, un valor compartido, ya que la mayoría se comunican. Ambos ediles coinciden en que «es importante aprobar los catálogos» y lo marcan como un objetivo para esta legislatura.