Los productores de melón de la Vila han recolectado este año más de una tonelada del producto estrella del pueblo. El buen tiempo y la ausencia de lluvias han ayudado a que la campaña haya sido muy buena como para ofrecer mucha cantidad y calidad a los consumidores, muy similar a la del año pasado. De esta manera, los mejores ejemplares se podrán encontrar este fin de semana durante los diferentes actos de la Festa i Fira del Meló.
Este año, sin embargo, una de las apuestas ha sido la producción de variedades de secano como la francès , claudio o fei pero el que se lleva la palma es la groguet de pinyol blanc .
Calidad
Unas variedades más dulces, que se pueden guardar unos seis meses, muy apreciadas por las fiestas de Navidad y que se pagan un poco más caras, a 0,90 euros el kilo, ya que las más conocidas como la calapoter se comercializan entre 0,50 y 0,70.
Así lo comenta Antoni Galmés de s'Hort Verd d'Es Cruce, uno de los principales productores de melón de Vilafranca y que tiene en venta gran parte de los melones de secano.
Galmés explica cuál es la técnica de los melones de secano: «El secreto es no sembrar demasiado tarde, preferiblemente entre los meses de marzo y mayo, y labrar a mucha profundidad para que las raíces busquen la máxima humedad». Así, los de secano «son de mucha más calidad porque no están forzados con nitrógeno como los de regadío», afirma Galmés, aunque los de secano no sean tan productivos como los de regadío.