El Ajuntament de Manacor saldó ayer una sus deudas pendientes con el que ha sido el mejor poeta del municipio y uno de los más brillantes de las letras catalanas del siglo pasado: Miquel Àngel Riera.
Por unanimidad de todos los partidos políticos el Ajuntament nombró ayer, en el curso de un pleno extraordinario doble, hijo ilustre al poeta y escritor, nacido en 1930 en la localidad y fallecido en Palma en 1996. También se nombró hijo adoptivo al filólogo Francesc de Borja Moll por su estrecha colaboración con mossèn Antoni Maria Alcover a la hora de elaborar del Diccionari Català-Valencià-Balear.
El acto fue especialmente emotivo por la nutrida presencia de familiares de ambos premiados, especialmente por parte de Riera. Estuvo presente su viuda, tres hijos y sus nietos, junto a muchos amigos. En el discurso, el Consistorio repasó la trayectoria del literato. Resaltaron su «obra de calidad, elaborada sin prisas y muy personal, que resiste el paso del tiempo». El resultado es un conjunto de seis poemarios, seis novelas y dos libros de relatos breves, que constituyen «algunos de los hitos más importantes de la literatura catalana de la segunda mitad del siglo XX», convirtiéndolo en «un escritor cuyo interés sobrepasa fronteras geográficas y lingüísticas».
En cuanto a Francesc de Borja Moll (Ciutadella, 1903-Palma, 1991) se recordó -en presencia de sus hijos Aina y Francesc- su trabajo junto a Alcover, de quien al principio recibía «cien pesetas» por cada mes que pasó colaborando con él. La elaboración del Dicionari ocupó buena parte de su vida como lingüista, lo que no le impidió «una intensa tarea como conferenciante, gramático y escritor».