J.SOCIES
La tradicional feria de octubre de Campos por segundo año consecutivo ha dedicado un espacio a la sobrasada, pero el mal tiempo quiso emular a los dirigentes municipales y ofreció una buena tormenta de agua y viento justo a la hora que las autoridades, tenían que iniciar su recorrido.
A media mañana algunos firaires miraban el cielo para acabar de decidir si montaban la parada, y es que la constante lluvia dejo algunos tramos de la calle sin ninguna parada. Mientras debajo de las arcadas del Ajuntament iban llegando las autoridades, muchas, más que estands de sobrasada, y de casi de todos los colores. Consellers; cuatro, dos autonómicos y dos insulares, alcaldes; seis. Y muchos más políticos del PP, UM y PSOE. Del PSM no se acercó nadie a firar en Campos.
A las tradicionales paradas de toda la vida de la feria de octubre, por segundo año y ya dando nombre a la feria una carpa recogía los estands de la sobrassada. Así, poco más de media docena de elaboradores de este embutido daban a conocer su producto junto a productores de queso, vino o aceite de Campos y del resto de la Isla.