La noticia de que la nueva normativa urbanística de Santa Margalida deja fuera de ordenación a dos manzanas de comercios y bares situados en pleno Paseo Marítimo y otras dos situadas en una de las principales avenidas comerciales (Avinguda Josep Tries) hizo saltar las alarmas esta semana en un municipio en el que los comercios fueron incluso anteriores a los barrios residenciales, allá por la década de los sesenta.
Mientras que el equipo de gobierno municipal (PP/CPU) trata de solucionar el «error» (así califican la circunstancia que ha llevado a suprimir el uso comercial en la zona) el PSOE de Santa Margalida se apresura a advertir de que la zona afectada puede ser mucho más amplia y pone en juego muchos puestos de trabajo. El portavoz del PSOE, Miquel Cifre, explica que una vez comprobada la normativa urbanística en tramitación, se aprecia que buena parte de las tiendas y restaurantes del centro comercial de Can Picafort quedan fuera de ordenación. Apenas una manzana y media de edificios mantiene el uso comercial y recreativo en el cruce del Passeig Colom con Josep Tries mientras que el tramo del Paseo Marítimo comprendido entre Ran de Mar y Pere Alcántara Peña y el resto del Passeig Colom y Josep Tries (las dos principales avenidas comerciales, la última de ellas peatonal) quedan con un uso casi exclusivamente residencial, a excepción de algunos hoteles.
Los socialistas entienden que la amplitud de la zona afectada «permite comprobar de una manera clara que no es un error y que tampoco se trata de dos manzanas aisladas que han quedado fuera de ordenación, como dicen desde el equipo de gobierno». «Hay algo más», asegura Miquel Cifre, que entiende que «el equipo de gobierno tiene que aclarar si este cambio que contemplan las Normas Subsidiarias responde a intereses que hay en crear nuevas zonas comerciales que en estos momentos se tramitan».