LLUC GARCIA/MARGA JOY
La situación económica del Ajuntament de Sóller es insostenible; «si se tratara de una empresa privada haría tiempo ya que habría cerrado y los empresarios estarían en la calle». Ese desalentador mensaje fue el transmitido por el alcalde Josep Lluís Colom a una veintena de asistentes al foro ciudadano en el que se explicó la nueva normativa de convivencia ciudadana y la situación económica actual.
Dicha situación obligó a que el martes el alcalde, Josep Lluís Colom, y el concejal de Hacienda, Francisco Rodríguez, viajaran a Madrid para entrevistarse con Alain Cuenca, director general de Economía, para solicitar al Ministerio de Economía y Hacienda que autorice un plan de saneamiento de 15 años de duración, a fin de poder afrontar la deuda que se mantiene con empresas y particulares.
Deuda
Dicha deuda asciende a la cantidad de 10 millones de euros, «6'8 de los cuales son técnicamente impagables», y 1'7 corresponden a facturas sin asignación de los ejercicios de 2006 y 2007, además de la deuda bancaria que, gracias a los bajos tipo de interés, es lo que menos preocupa al Consistorio.
El interventor, Sebastià Vicens, recuerda que «la ley obliga a tomar medidas para hacer frente a las obligaciones». El problema es que esta misma ley marca un máximo de tres años, un periodo «imposible», según explican los informes del interventor. Para el Ajuntament la deuda deberá financiarse «en un los próximos de 15 años», un tiempo que se ha autorizado solamente en casos «excepcionales» en el Estado español, y que de concederse condicionaría los presupuestos hasta el 2024.
La portavoz municipal, Catalina Esteva, ha asegurado que Colom y Rodríguez «percibieron buena receptividad» por parte del director general de Economía, lo que de momento da esperanzas al Consistorio aunque, de momento, lo único que se puede hace es esperar la respuesta del ministerio.