El Pi Gros de Santa Maria, en la finca de s'Arbossar, se muere. Algunas de sus ramas aún conservan el color verde, pero el amarillo va apoderándose de él: las señales indican que ha empezado a morir.
En octubre de 2007, el cap de fibló que atravesó Mallorca por el Raiguer dañó el árbol notablemente, llegando a arrancar parte de su copa. Entonces se comenzó a temer por la supervivencia de la planta centenaria.
El Pi Gros es un imponente ejemplar de pino carrasco (Pinus Halepensis), quizá el más viejo (se cifra entre 350 y 400 años) y el de mayor diámetro de los que habitan en suelo de Balears.
Ejemplar querido
Con los años, las ramas inferiores se habían ido doblando hasta alcanzar el suelo, de manera que para acceder al tallo existe un túnel. Su tronco tiene una altura de unos veinte metros, y su diámetro se acerca a dos. Se ha especulado con que podría tratarse del pino carrasco con el «cuerpo» más ancho del mundo.
En 1992 la Conselleria d'Agricultura lo incluyó en el catálogo de árboles singulares. Desde entonces, técnicos del Govern se hacen cargo de su cuidado y conservación.
Por sus características, el Pi Gros es sin duda el árbol más emblemático y querido de Santa Maria. No en vano ha sido un lugar tradicional de almuerzos y pancaritats por parte de los santamariers.