Ayer, último día de la Fira del Fang, era momento para el balance. Durante los 9 días han pasado, según cifras de la organización, un total de 29.000 personas, algo más de la mitad de los 50.000 del año pasado. Entre las visitas cabe resaltar los 38 centros escolares, con un total de 3.040 visitantes entre alumnos y profesorado, que han participado en los talleres didácticos dedicados al color en la cerámica.
Pese a todo, los artesanos comentan que el índice de ventas ha sido parecido a otros años. En esta ocasión al mal tiempo reinante durante casi toda la semana, las voces críticas añaden el hecho de haberse solapado la diada autonómica y la diada de los cazadores. «Todo esto, igual que los mercados de los fines de semana hace que la gente se reparta; hace 25 años muchas de estas actividades no existían y la gente no tenía tanta oferta donde elegir», analiza Rafel Sunyer, de l'Albelló de Pòrtol, autor de la escultura representativa del 25 aniversario de la Fira que ha servido como logo y cartel de la misma.
Precisamente una de las novedades de este año, que se pudo contemplar ayer, es un mural conmemorativo del aniversario, consistente en un conjunto de placas cerámicas realizadas por los diferentes artesanos que participan en la Fira. Desde el área de Cultura están en fase de decidir cual será la futura ubicación del mural, una vez que se haya procedido a la cocción de las diferentes piezas que forman el conjunto.