Durante lo que llevamos de año «los visados de proyectos han bajado en Manacor un 92 por ciento». Así lo anunció la portavoz del grupo municipal ALM-UM, Catalina Julve.
La coalición se basa en datos del Col·legi Oficial d'Arquitectes de les Illes Balears, que ofrece el principal indicativo de la situación del sector de la construcción en las Islas. Esto significa que si en el 2007 el colegio de arquitectos dio el visto bueno a 384 nuevas promociones inmobiliarias en Manacor, este año sólo han sido 30 las obras autorizadas.
Ante esta situación, el grupo municipal ALM-UM ha exigido la retirada del convenio urbanístico que prevé la construcción de unos 900 pisos en la zona de s'Hort den Roig, a cambio de los terrenos para la nueva escuela de la ciudad. Según la portavoz de esta formación, Catalina Julve, esta nueva promoción «agravará aún más la crisis del sector inmobiliario de Manacor, ya que se tienen muchos pisos a la venta que no se compran debido a la situación económica que estamos pasando». Según Julve «si se autorizan estos 900 pisos sólo se agraviará la situación del sector».
Para ALM-UM, el equipo de gobierno del Ajuntament (PP-AIPC) plantea «la firma un convenio que permite construir 900 pisos, que aportarán unos 3.000 nuevos habitantes a Manacor. Un incremento de población que obligará a planear nuevas escuelas, más infraestructuras, más centros de salud y más de todo».
Además, desde ALM-UM se critica que las cláusulas que blindan el convenio establezcan que «si en cinco años no se ha aprobado el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), el Consistorio tendrá que pagar 197 euros por cada uno de los 294.000 metros cuadrados que incumbe el convenio que en estos momentos está en fase de aprobación inicial». Una suma que sobrepasa los cinco millones de euros. «¿A quién se pretende beneficiar?», se pregunta Catalina Julve.