Ya se ha convertido en una cita ineludible para los vecinos y amantes de la cebolla tierna de Montuïri, asistir en estas fechas a la calçotada de S'Hort des Pont. En esta ocasión, con las brasas de los sarmientos de la vid se cocinaron centenares de calçots para los comensales con el baverall posat, elaborado para la ocasión, esperaban impacientes a los calçots.
Pep Serra Sureda, el cocinero de S'Hort cada año es el encargado de organizar este evento que cada día cuenta con más adeptos, y es que los calçots, además de la fiesta que conlleva su elaboración es un plato que gusta a mucha gente. Los calçots son una variedad de cebollas tiernas, cebollas poco bulbosas y más suaves, que se hacen guijar calzándolas a medida que crecen. En Pep de s'Hort, este año, ha elaborado más de 2.000 calçots traídos expresamente de Valls para la ocasión.
Y es que el origen del calçot hay que situarlo en esta población catalana. Hay varias versiones, pero la más conocida es la que atribuye a en Xat de Benaiges, un campesino que vivió en Valls, a finales del siglo XIX, la invención de este cultivo. En Xat de Benaiges puso un par de brotes de cebollas al fuego y descubrió casualmente un plato que a principios del siglo XX ya era habitual en muchos hogares de Valls.