J.SOCIES
El centro de Can Real, en Petra, ya es una realidad. «El edificio se ha convertido en el club social de las dos asociaciones de la tercera edad del pueblo», así lo dijo la consellera de Presidència, Rosa Puig, quien asistió atónita a las críticas que hizo en el mismo acto de presentación el equipo de gobierno municipal del PSM, calificando el proyecto de «capricho del PP de Petra y del Govern».
La jornada de puertas abiertas mostró a todos los vecinos del municipio la importante rehabilitación que ha sufrido el edificio que compró el Govern en 2004 por un valor de 415.000 euros, y que ahora ha sido objeto de una inversión de 900.000 euros para hacer dos salas, despachos, una zona de servicios, un bar y un patio en la planta baja y tres salas en la planta piso.
En el acto de presentación del club social de las personas mayores, la consellera Puig manifestó que «este centro tiene que servir para unir a las dos asociaciones, queremos que sea un espacio de convivencia». También señaló que «el Govern ha hecho posible una de las reivindicaciones de los mayores de Petra, por eso se ha hecho una gran inversión, primero con la compra de la casa de Can Real y después, con una reforma de 900.000 euros». Acto seguido habló la teniente de alcalde, Catalina Mas, y excusó la presencia del alcalde, Joan Font, ya que «fue invitado por teléfono el Jueves Santo y no ha podido cambiar sus compromisos». Después, Mas añadió: «Nosotros ofrecimos el solar de Ca ses Monges, que requería una mínima inversión, pero el PP de Petra y el Govern se encapricharon con la compra de Can Real». Puig asistía atónita y boquiabierta a las palabras de Mas, mirándose en repetidas ocasiones con sus compañeros del PP de Petra.