Bunyola es, junto a Calvià y Andratx, el municipio de Mallorca que registra un mayor nivel de riqueza, según establece el anuario económico de La Caixa. Maria Cabot, alcaldesa de Bunyola, se mostró en cierto modo sorprendida por la presencia de la localidad que ella preside en lo más alto de la lista de renta económica. «El pueblo no es rico, pero sí es cierto que hay algunos vecinos que tienen mucho dinero». La alcaldesa señaló que Bunyola cuenta con varias fincas muy extensas y de gran valor económico, pero que esta riqueza no se refleja en las arcas municipales. Sin embargo, Cabot recordó que antaño, gracias a las ganancias que generaba el carbón que se obtenía de sa Comuna el Ajuntament de Bunyola ingresaba mucho dinero, y ello repercutía en una riqueza, de la que podía disfrutar el pueblo. «El carbón se repartía por toda la Isla». La situación ahora es muy diferente y en estos momentos sa Comuna, no sólo no aporta un beneficio económico, sino que se gasta mucho dinero en su mantenimiento, al tratarse de una finca municipal.
Otra de las cuestiones que tuvo mucha importancia para la alcaldesa para que Bunyola tuviera una buena situación económica fue la presencia del tren. Con este medio de transporte llegaron también varias industrias, que ahora ya han desaparecido. «El tren supuso un gran progreso para el pueblo». La alcaldesa confía en que el nuevo polígono industrial que se va a construir en el municipio atraiga a muchas empresas, y que con ello «se creen muchos puestos de trabajo».
La alcaldesa señaló que «Bunyola se ha convertido en un pueblo dormitorio, pero que tiene la ventaja de que está muy cerca de Palma y que la comunicación es muy buena». De hecho, Cabot recordó que en estos momentos las viviendas son muy caras, y que el precio por metro cuadrado «vale el doble que en Santa Maria». La alcaldesa afirma que la mayoría de vecinos «no son ricos, sólo son gente trabajadora».