La mesa de contratación de la Conselleria d'Obres Públiques acordó ayer adjudicar la autovía s'Arenal-Llucmajor a la Unión Temporal de Empresas (UTE) integrada por las constructoras ACS Obras y Proyectos y Matias Arrom Bibiloni. Finalmente, la obra tendrá un coste de 30'3 millones de euros (5.041 millones de las antiguas pesetas), además de las expropiaciones valoradas en 3'6 millones de euros. La constructora tendrá un plazo de ejecución del proyecto de 15 meses y medio, lo que supondrá que la autovía estará concluida para el año 2006.
Tras la adjudicación del proyecto, la vía rápida podría comenzar a ejecutarse el próximo mes de abril tras la firma del contrato con la empresa constructora. El objetivo de la Conselleria d'Obres Públiques es que se inicie lo antes posible como ha ocurrido con las variantes de Inca y Llucmajor que ya están en obras. Según el proyecto, sólo será posible el aprovechamiento de un tramo de 4'5 kilómetros de la calzada existente al principio de la misma. A partir de ahí y hasta el kilómetro 8'5, la vía rápida será de nueva construcción.
La autopista contará con una mediana de 12 metros y 2 calzadas de 10'5 metros. En total, 33 metros de ancho. Cada calzada, constará de dos carriles de 3'5 metros, arcenes exteriores de 2'5 metros e interiores de 1 metro. En total, será necesaria la expropiación de 475.000 metros cuadrados para realizar la obra, que tendrá un coste de 3.626.012 euros. La mayor parte del terreno que habrá que expropiar corresponde a suelo no urbanizable (473.448 metros cuadrados). Asimismo se verán afectados 355 metros cuadrados de edificaciones y 400 árboles.