La autovía Palma-Llucmajor estará finalizada a finales del año que viene y su ejecución costará 33 millones de euros, según explicó ayer la consellera d'Obres Públiques, Mabel Cabrer. Cabrer se desplazó hasta el Ajuntament de Llucmajor donde, junto con el alcalde del municipio, Lluc Tomàs, presentó el proyecto de la variante del municipio. Ayer comenzaron las obras de esta importante infraestructura que desviará del centro de la localidad un tráfico diario de entre 20.000 y 30.000 coches. La consellera y alcalde acudieron a visitar el inicio de las obras.
El coste total del proyecto de la variante es de 25'6 millones de euros. Se inicia en el polígono de Son Noguera y finaliza 6'3 kilómetros después en el cruce con la carretera de Campos. La calzada tendrá una anchura de 34 metros, con dos carriles en cada uno de los sentidos y una mediana interior de 12 metros. La variante tendrá un paso inferior en el camí de sa Torre, tres pasos superiores en los caminos de Cap Blanc, Cala Pi y Son Marrano y un enlace doble en la conexión con la carretera de s'Estanyol. La consellera d'Obres Públiques explicó que el coste del proyecto incluye 3'3 millones de euros para reducir el impacto ambiental de las obras, ya que la variante circula por un nuevo trazado de carretera en la modalidad de autovía.«Al margen de las posturas radicales y demagógicas de algunos partidos, este Govern demuestra que está trabajando por el bien de todos», señaló Cabrer. La consellera recordó que, en lo que llevamos de año, las carreteras de Balears ya se han cobrado la vida de 23 personas y se mostró convencida de que ello se debe en parte a la mala situación en la que se encuentran las carreteras. «Este Govern huye del inmovilismo que han practicado otros partidos y además no defraudará a los ciudadanos que apostaron por un gobierno del PP que defendió las actuaciones en carreteras», añadió la consellera d'Obres Públiques. La consellera criticó a los partidos que asumen en exclusiva la defensa del medio ambiente. «El respeto al medio ambiente no es patrimonio de nadie porque es algo que todos amamos», dijo Mabel Cabrer. Al margen de las críticas a los demás partidos, la consellera destacó que las obras de la variante de Llucmajor que se iniciaron ayer son las primeras que se ejecutan con cargo al convenio de carreteras suscrito en su día entre el Govern balear y el Gobierno central. «Estamos cumpliendo el compromiso de acabar con una situación tercermundista en un tiempo récord», señaló la consellera d'Obres Públiques.