Los padres de alumnos del colegio público de Ponent han vuelto a insistir en la necesidad de mejorar la seguridad del paso elevado para viandantes sobre la línea del tren y de la carretera de Lloseta en aquél punto, que diariamente atraviesan los alumnos para ir al centro escolar. Según explica Fernando Martín, representante de la Asociación de Padres de Alumnos del centro, desde hace tres años la estructura del paso elevado sobre las vías del tren no se encuentra en buenas condiciones. «Las barandillas están oxidadas, faltan barrotes y las estructuras metálicas se mueven, de forma que se convierten en un peligro para los chicos que pasan por allí», afirma.
Martín asegura que durante este tiempo han trasladado sus peticiones al Ajuntament d'Inca que al mismo tiempo las ha hecho llegar a Serveis Ferroviaris de Mallorca. «Pero en todo este tiempo SFM no ha dado señales de vida» y añade que el año pasado fue el propio Ajuntament ante la situación de peligro en el paso elevado, quien se encargó por su cuenta de hacer algunas mejoras, como arreglar el pavimento para evitar patinazos.
Al mismo tiempo, los padres también vienen reclamando la instalación de un semáforo en la carretera de Lloseta en el punto donde desemboca el paso elevado para mejorar la seguridad de los jóvenes que han de cruzar esta vía. En este sentido, el responsable de Tránsito del Ajuntament, Joan Deus, ha explicado que «se trata de una carretera y la competencia es del Consell. Puedo asegurar que desde hace tres años pedimos al CIM el semáforo sin obtener respuesta».