La gran demanda de derechos funerarios ha obligado al Ajuntament de Porreres a modificar el proyecto inicial de ampliación del cementerio municipal. Este hecho provocará que las obras concluyan el próximo mes de abril con seis meses de retraso. El proyecto inicial incluía la construcción de 37 capillas y 55 tumbas de ocho nichos cada una por una parte y 150 nichos y 112 columbarios. Todo esto se vendió ante la demanda de las familias del pueblo y el proyecto se amplió sobre la marcha con 50 nichos y 8 capillas más.
A pesar de estos cambios, el presupuesto de las obras valorado en 1.300.000 euros no aumentará mucho porque, según explicó el alcalde Joan Sastre, «ya incluía la posibilidad de hacer algún cambio o modificación». El primer edil apuntó que de los nichos y capillas añadidas «sólo queda algún nicho», ya que «se han vendido todas las capillas y tumbas bajas». Sastre comentó que el objetivo es que las obras concluyan el mes de abril y que la inauguración de la ampliación se celebre en mayo, el día de las Festa de la Creu en que se bendecirá el remodelado cementerio.
Los precios que se han pagado han sido de 18.000 euros por una capilla; 13.500, por una tumba; 1.500 por un nicho y 900 euros por un columbario. La ampliación del cementerio se ha realizado en una zona de aparcamiento y comenzó en octubre de 2002.