M.PUIGRÓS/C.VENY/J.SASTRE/C.RUIZ
Los partidos políticos en la oposición criticaron ayer duramente
que la Conselleria d'Obres Públiques no haya aprovechado el trazado
actual de la carretera Inca-Manacor para la creación de la autovía.
El GOB también se suma a esta denuncia. «El proyecto de autovía
constituye la mayor agresión a es Pla de Mallorca de todos los
tiempos. Difícilmente se podría haber presentado un proyecto más
impactante, caro e inútil», expone. Francesc Quetglas, portavoz
parlamentario del PSOE, indicó que «el PP continúa con su política
sistemática de engaño. Al principio, hablo de una autovía blanda,
aprovechando el trazado existente, pero finalmente se separa del
trazado actual».
A juicio de Quetglas, el proyecto «es fruto de la improvisación por la necesidad de aparentar hiperactividad. Además, la autovía condicionará la estructura territorial de la Isla». El PSM consideró que el proyecto confirma la peor de las previsiones. Antoni Alorda señaló: «Se empezó hablando de un desdoblamiento y al final se ha presentado una autopista de seis carriles, donde la carretera actual se convierte en un vial de servicios. Y no olvidemos que se trata de un fraude electoral».
«PP-UM han firmado el pacto por la grava y el cemento. Se ríen de las movilizaciones ciudadanas», subrayó Alorda, que criticó la irresponsabilidad la consellera Mabel Cabrer al hablar de velocidades de 150 kilómetros/hora.
A EU-EV el proyecto de la autovía le parece «faraónico». «La autovía Inca-Manacor no es necesaria. Los recursos utilizados para este proyecto se podrían destina a la ampliación del ferrocarril», destacó Marilena Tugores. «Es irónico que digan que hacen un túnel y un viaducto para no afectar al encinar cuando se destruye una zona como es Pla». Por su parte, Antoni Pascual, conseller d'Obres Públiques del Consell consideró «correcto» el proyecto presentado por su homóloga en el Govern, Mabel Cabrer. «El túnel es muy buena solución para la protección del encinar y las expropiaciones no son muy exageradas», dijo.