Un vecino de Artà, Tomeu Payeras, iniciará hoy una huelga de hambre indefinida delante de la Casa Consistorial, como protesta para evitar que su vivienda construida en la Colònia de Sant Pere sea demolida. El afectado tiene su casa en una finca conocida como Can Virell, al ser la edificación muy pequeña, solicitó al Ajuntament d'Artà una ampliación de la casa presentando los planos y en base a los informes favorables del arquitecto municipal, le fue concedida la obra. El problema surgió cuando sus vecinos, A. Puigmartí y J.Lladó, interpusieron un recurso contra el Ajuntament por haber concedido el permiso. En enero de 2002, el juez da por buena la licencia y desestima el recurso, pero los vecinos recurren y el TSJB dictó sentencia y anuló la licencia. No obstante decía: «Reconocemos el derecho a que por la Administración demandada se adopten las medidas para el restablecimiento de la legalidad».
El Ajuntament anula la licencia y paraliza las obras. El 18 de julio de 2003, Payeras presenta el proyecto de adaptación a la legalidad y «desde entonces espero la decisión municipal», explica el afectado quien está convencido de que la sentencia se basa «en falsedades». La alcaldesa de Artà, Margalida Tous, ha explicado que «el Ajuntament no puede actuar porque está pendiente de un recurso de súplica que todavía no está resuelto. Me sabe mal que Payeras se lo tome de esta forma».