El Plan Territorial de Mallorca dedica un apartado especial a la cementera de Lloseta, una industria que produce un importante impacto paisajístico y ambiental en el entorno, según reconoce el estudio elaborado por el Consell de Mallorca. El organismo insular expone la necesidad de efectuar una reconversión de la zona, incluyendo también los términos de Binissalem e Inca, puesto que se encuentra a escasos 1.000 metros la autopista Palma-Inca y en una situación muy visible. Para paliar el impacto visual de la fábrica Lloseta Valenciana de Cementos, el organismo insular propone la creación de un área forestal de un kilómetro cuadrado aproximadamente alrededor de la cementera. Para ello, se prevé incentivar económicamente a los propietarios de las parcelas para la plantación y mantenimiento de arbolado de gran porte.
«Debería aprovecharse para que el área de arbolado llegara a contactar con la autopista, en la zona del Foro de Mallorca, para lograr romper la percepción de un continuum urbanizado que se puede llegar a tener desde la autopista tras ver Santa Maria, su polígono, Consell, el polígono de Binissalem y el propio Binissalem», explica textualmente el Plan Territorial de Mallorca. El Consell también propone recubrir las estructuras más elevadas de la fábrica de cemento con una sobreestructura vegetal. Sobre esta actuación, el organismo subraya que «parece conveniente» que la sector público incentive o subvencione de algún modo el proyecto.Entre las medidas contra la contaminación atmosférica figura el encapsulamiento de los elementos emisores de polvo de cemento, así como la instalación del filtros antiemisores y el almacenamiento del material de combustión.