El Ajuntament de ses Salines ha cometido una infracción urbanística grave al haber ampliado de forma ilegal el volumen del edificio de la Casa Consistorial en unos 600 metros cuadrados (200 metros cuadrados por planta), vulnerando de esta manera las vigentes Normas Subsidiarias municipales. En estas normas, concretamente en su apartado «C) Ayuntamiento de la Vila de ses Salines», del artículo 114, de condiciones urbanísticas referentes a «zona de equipamientos», consta que «se mantendrán íntegramente las condiciones de edificabilidad del edificio existente, sin posibilidad de aumento de volumen». Sin embargo, en el proyecto que comenzó a ejecutarse hace dos años y cuyas dependencias ya se usan, se construyó un sótano, una planta baja y un primer piso en un espacio ocupado hasta entonces por un jardín de la parte posterior.
Por otra parte, en la revisión de estas normas aprobada inicialmente a finales del año 2000 por el Ajuntament donde sí se incluía la posibilidad de ampliar la Casa de la Vila, la Comissió de Ordenació del Territori del Consell de Mallorca en el punto 44 alegó que «las ampliaciones del artículo 125 A) (Ajuntament de ses Salines) no serán posibles hasta que no esté aprobado el catálogo de edificios del municipio», que no existía cuando se comenzaron las obras en el edificio. No obstante, el Ajuntament ha aumentado el volumen de la Casa Consistorial cuando la citada revisión de normas no ha sido aprobada definitivamente por el Consell de Mallorca y lo que es evidente es que las obras comenzaron cuando ni siquiera se contaba con el borrador.
El delegado de Urbanisme del Ajuntament de ses Salines, gobernado por el pacto UM-PP, Antoni Bonet (UM), en lo referente a la deficiencia detectada por el Comissió d'Ordenació del Territori afirmó que «cuando nosotros presentamos el proyecto aún no había entrado en vigor la ley según la que hay que presentar un catálogo de edificios municipales» para aprobar unas nuevas normas urbanísticas. Sin embargo, en cuanto al citado artículo de las normas urbanísticas en vigor donde consta que el edificio no puede ser ampliado, Bonet se limitó a afirmar que «nos basamos en los informes de los técnicos municipales».