El Ajuntament d'Andratx prepara la edición de trípticos informativos para recordar a los propietarios de los inmuebles de los cascos urbanos la obligatoriedad de conectarse a la red municipal de agua potable. Asimismo, la alcaldesa, Margalida Moner, ha informado que para esta próxima semana está prevista la firma de un bando de Alcaldía en el mismo sentido. «En las calles de Andratx y el Port donde ya hay red, los vecinos tienen la obligación de estar conectados», recordó ayer la batlessa.
Son muchos los domicilios que aún no están conectados a la red pública y se suministran a través de aljibes particulares que son llenados mediante camiones cisterna. Sin embargo, en estos últimos días se han llevado una desagradable sorpresa cuando al llamar a las empresas que les abastecen éstas han dicho que no podían servirle el pedido. Esta circunstancia ha provocado un alud de quejas en la Casa Consistorial.
La empresa concesionaria del suministro, Gesba, ha informado que no venderá más agua de sus pozos a las empresas de camiones cuba si el destino son domicilios por donde hay red pública. El contrato de la concesión ya contempla esta situación. En cambio, las empresas suministradoras que disponen de recursos propios, es decir, tienen pozos privados, siguen suministrando con normalidad.
La alcaldesa señala que «no es aceptable tener una red y no utilizarla» y recordó que en la actualidad la tasa de conexión es de unas 72.000 pesetas. Este pago puede ser abonado de forma fraccionada e incluye la instalación del contador y la mano de obra. La concejala socialista Ana María Porcel expresó ayer su preocupación ante esta súbita decisión de no suministrar a agua a los domicilios sin que previamente se haya informado a la población de esta situación. «La gente irá acabando sus reservas y no tiene tiempo de formalizar la conexión», ha comentado Porcel.