Un grupo de 16 alumnos se han quedado sin plaza en el instituto Mossèn Alcover de Manacor, donde en el plazo de la preinscripción quedaron admitidos. Los padres de los alumnos han presentado sus quejas ante la Direcció General de Planificació i Centres, en una carta dirigida a Jaume Gual, manifestando que «la admisión y matriculación de los alumnos en los centros docentes sostenidos con fondos públicos antes del inicio del periodo de solicitud de admisión, la Conselleria d'Educació i Cultura debe comunicar a los centros la oferta que deben realizar en función de la composición de los grupos que, para cada tipo de enseñanza, se haya aprobado provisionalmente para el próximo curso escolar.
Resultando que en el Instituto de Mossen Alcover se habían ofrecido una serie de plazas para el bachillerato de sociales, parte de las cuales posteriormente han sido anuladas». Visto lo ocurrido, los afectados solicitaron «la anulación de la orden del 23 de mayo y que sean admitidos todos los alumnos inscritos y que habían resultado admitidos».
Uno de los padres de los alumnos afectados ha explicado: «Nos mandaron al instituto de na Camel·la, donde nos explicaron que estas plazas no estaban previstas. Además, la situación de este centro nos desespera un poco porque anunciaron que como medida de presión no comenzarían las clases si la Conselleria no se comprometía a construir otro instituto en Manacor».
La respuesta por parte de la Conselleria d'Educació i Cultura fue que «una vez que los centros conocen cual es la oferta de grupos es el consejo escolar el que tiene la potestad de sacar el número de plazas vacantes. En cuanto al hecho de cubrir las plazas vacantes tienen derecho preferente, según la normativa vigente, los alumnos del mismo centro». Los padres apuntan que el director del Mossèn Alcover les había asegurado que «el centro podía asumir este grupo de alumnos».