Las obras de construcción de una rotonda provisional para desviar el tráfico de la glorieta de Santa Ponça que permita llevar a cabo su ampliación están prácticamente concluidas, según indicaron ayer fuentes del Departament de Carreteres. Ahora, los ingenieros estudian cómo mejorar el tráfico por este tramo y si es conveniente desviar la circulación durante la temporada estival.
Las mismas fuentes aseguraron que es posible que se desvíe parte del tráfico, pero en ningún caso se desplazará toda la circulación de la rotonda de Santa Ponça a la glorieta provisional. Lo que sí es seguro es que durante estos meses de verano, las obras de ampliación de la rotonda de Santa Ponça se ralentizarán debido al elevado tránsito de vehículos que soporta esta intersección. «Se hará poca cosa para intentar molestar lo menos posible al tráfico», según el Departament de Carreteres.
Desde el pasado mes de marzo en que comenzaron las obras, los trabajos se han centrado en la construcción de la mencionada rotonda provisional y la modificación de los servicios (GESA, Telefónicas, etcétera). Esta nueva rotonda es necesaria para desviar el tráfico de la carretera C-719 (Palma-Port d'Andratx) y proceder a la ampliación de la actual glorieta, proyecto que incluye además un paso subterráneo.
Esta obra tiene un plazo de ejecución de seis meses, pero es previsible que sufra algún retraso debido al parón en los meses de verano. La ampliación de la rotonda será considerable. Actualmente, la glorieta es circular y tiene 22'5 metros de radio. El nuevo proyecto prevé construir una glorieta elíptica de dimensiones interiores de 45 metros en su eje mayor y 26 metros en su eje menor para absorber todo el tráfico.