Las principales calles de Sant Joan se vistieron ayer de gala para celebrar las tradicionalesBeneïdes en la festividad del patrón de los conductores, Sant Cristòfol. Alrededor de un centenar de motocicletas antiguas y también de gran cilindrada se dieron cita a partir de las 18:00 horas en la calle Mestre Mas de la localidad, a los pies de la iglesia parroquial de Sant Joan. Desde este punto iniciaron un largo desfile a través de la calle Mayor y la calle de Palma.
Todos los participantes se detuvieron delante de la antigua estatua de Sant Cristòfol para ser bendecidos, tradición que se viene realizando desde el año 1958, fecha en la que la Penya Motorista de Sant Joan inauguró la fiesta de Sant Cristòfol. Desde entonces muchas han sido las motos y demás vehículos que han desfilado por las calles de Sant Joan a la espera de ser bendecidas.
Además de las motocicletas modernas y antiguas también estuvieron presentes una serie de ejemplares de coches seiscientos y hasta una barca, transportada por un remolque. En las Beneïdes estuvieron representados varios moto clubs de Mallorca, como el Moto Club Siurell, Imperials, Damas Cromadas y Harley. Los participantes recibieron una placa de recuerdo y un boleto para entrar en una rifa de ensaimadas. La celebración concluyó con una Misa oficiada por el rector de Porreres, Joan Rosselló.