Alrededor de 80 vecinos de Montuïri llenaron anoche el salón de plenos de la Casa de la Vila para escuchar con mucha atención las explicaciones que dio el conseller d'Obres Públiques, Josep Antoni Ferrer, sobre el proyecto de desdoblamiento de la carretera de Manacor en el tramo comprendido entre Son Ferriol y Montuïri.
El conseller explicó ante un expectante auditorio que el equipo de técnicos que ha estudiado la situación de la carretera actual ha planteado cuatro alternativas, entre las que se considera la número 3 como la más viable, caracterizada por la presencia de una decena de rotondas. El proyecto recomendado por los técnicos prevé realizar el tramo Palma-Algaida en 12 minutos y Palma-Montuïri en 18.
Ferrer dice que el objetivo es hacer una carretera «cómoda», integrada en el paisaje, que elimine el colapso actual y que permita hacer adelantamientos sin peligro. La seguridad es fundamental y por ello se han suprimido todos los giros a la izquierda, agregó el conseller.
Un ingeniero de Obres Públiques que acudió al acto señaló que las principales causas de accidentabilidad actual son el exceso de velocidad, las distracciones, no respetar las señales de tráfico y no guardar las distancias de seguridad. Los murmullos fueron frecuentes entre el público.