El Ajuntament y las Fuerzas Armadas están negociando la próxima retirada del monumento a los Caídos, ubicado a pocos metros de la gasolinera del Port. El cuartel de San Carlos se ha interesado por trasladar esta pieza a su museo militar. Se acabaría así con el último de los monumentos que hay en Pollença conmemorativo de la dictadura del general Franco. El monumento honra exclusivamente a los caídos del bando franquista durante la Guerra Civil.
Durante los años que estuvo en la oposición, el partido
nacionalista de Pollença presentó diferentes mociones al pleno para
retirar unos monumentos que, a su juicio, atentan contra la
dignidad de las personas. No fue sin embargo hasta el año pasado
cuando el equipo de gobierno del Ajuntament de Pollença "integrado
por PSOE, UM y PSM" aprobó por pleno la retirada progresiva de
estos elementos. El Ajuntament de Pollença todavía no ha decidido
si la pieza será sustituida por otra en favor de la paz y la
libertad.
El PSM propuso en un primer momento transformar el monumento en
otro por la libertad en lugar de retirarlo de su lugar original,
pero las Fuerzas Armadas han reclamado lo que consideran parte de
su patrimonio. El Ajuntament de Pollença negocia ahora con los
militares los términos en que se efectuará el traslado, ya que la
estatua está bastante deteriorada por lo que deberá ser desmontada
por manos expertas que aseguren su conservación.